Hoy nos hemos acercado a Mallorca para hablar con Marcelo y Aïna, dos de las personas que han compartido en todo momento el espíritu de El Ganso en Mallorca. Les llamamos los embajadores de la marca en la isla porque hasta la fecha han sido dos de las personas que han compartido en todo momento la alegría y el optimismo que nos caracteriza. Hoy Marcelo y Aïna nos abren las puertas de sus vidas, del casco histórico de esta bella isla y de su propia historia en El Ganso. ¡Allá vamos!
¡Hola Aïna! Marcelo nos ha contado que acabas de ser abuela y estás plenamente feliz, ¿cómo te sientes? ¿Haces mucho El Ganso con tu nieto?
Estoy pletórica. Mi nieto Hugo me rejuvenece. Me hace sentir cosas que ya tenía olvidadas. Volver a jugar con el como una niña pequeña… es una palabra grande, ABUELA! jijijiji
Sabemos que te encanta la moda y que tienes una gran experiencia en este sector así que nos gustaría preguntarte, ¿qué look le recomendarías a una mujer Ganso?
Me gusta la mujer que sea atrevida, transgresora, que se anime con colores novedosos… vestirse es mucho más que ponerse ropa, es mostrar tu personalidad y carácter. Me gustan mucho las mujeres que usan corbata… es un complemento muy masculino, pero en la mujer me parece elegante y sofisticada. Combinada con nuestras americanas de El Ganso, quedan ideales. Los vestidos vaporosos marcando la figura, corte ideal, arriba de la rodilla. Y unos buenos tacones… imprescindibles!!
¿Cómo has visto la evolución de la marca en la isla?
El público de Mallorca suele ser bastante conservador, y al principio le costó un poco comprender el concepto que proponíamos. Tuvimos la suerte de que muchos trabajadores de la Audiencia Provincial (estamos muy cerca de la magistratura de Baleares) se acercaron a nuestra tienda y en cuanto se probaron las americanas con ese corte tan impecable… ya se convirtieron en clientes fieles. Y hasta el día de hoy. Con el paso de los años, la evolución ha sido espectacular. Hoy en día, somos un punto de referencia en la moda de Mallorca, tanto para la gente de nuestra isla, como para los muchos visitantes extranjeros que tenemos por aquí cada año.
¿Cuál es tu rincón favorito de Mallorca? ¿Por qué?
Un pueblecito de pescadores, muy familiar, que se llama Sa Rápita, muy típico de nuestra isla, al lado del mar… no hay turistas allí. En el horizonte se divisa el archipiélago de Cabrera, que es el primer parque Nacional marítimo que tenemos en España. Me aporta mucha paz y tranquilidad… allí desconecto.
¡Hola Marcelo! Sabemos que te gusta la pintura y la literatura por eso nos gustaría saber cuáles son tus artistas preferidos y qué es lo que más te atrae de cada uno de ellos.
A mí me gustan las expresiones artísticas que me hagan sentir cosas, que no me dejen indiferente. Necesito que me transmitan emociones. Me gusta mucho Joan Miró, el gran pintor de sueños, uno de los grandes iconos de Mallorca, me apasiona Picasso, me gusta Jason Pollock, me divierte mucho Andy Warhol… De literatura, me gusta el realismo mágico latinoamericano, García Márquez, Cortázar, Borges, Isabel Allende… y también me gusta escribir relatos cortos...
A lo largo de tu vida has vivido en múltiples países y te has contagiado de diversas culturas, ¿cuál es el país que más te ha impactado? ¿Por qué?
Me ha impactado mucho Israel. Se parece muy poco a lo que nos muestran en las noticias desde aquí… Es un pequeño país siempre envuelto en controversias que, sin embargo, tiene un potencial humano increíble, una diversidad cultural impresionante, gente muy acogedora y que ha sabido desarrollarse tecnológicamente de una manera asombrosa. Invito a cualquier persona que lea esto, a que no se deje llevar por estereotipos, que lo visite, y estoy seguro, que acabará tan sorprendido como yo. La realidad no siempre es como nos la cuentan por la tele…
Mallorca es una isla maravillosa con numerosas opciones deportivas, ¿practicas algún deporte? ¿En qué ocupas tu tiempo libre durante los días de verano?
Los días libres de verano… playita!! Tenemos lugares increíbles en la isla, pequeñas calas de piedra paradisíacas o largas playas de arena blanca, un mar cristalino que nada tiene que envidiarle al Caribe… ¡Somos unos privilegiados viviendo en Mallorca! En verano, playa, sin dudarlo… y en invierno, largas caminatas por la sierra de Tramuntana, flamante Patrimonio de la Humanidad, un paisaje bellísimo, increíble…
Ahora que ya eres licenciado en psicología, ¿has logrado comprender al cien por cien la mente humana? Jeje
Que va… la mente humana es de una complejidad infinita… Es verdad que, a final de cuentas, todos buscamos lo mismo, que nos quieran, que nos acepten, que nos valoren… pero cada cual busca su manera de satisfacer sus necesidades de maneras muy diferentes… Intentar ayudar y acompañar a cada persona en su proceso de búsqueda de respuestas, es mi reto personal, mi meta…
Ahora que ya sabemos parte de vuestras historias personales nos gustaría preguntaros a ambos cuál es vuestra idea de equipo y cómo habéis ido salvando las clásicas dificultades que han podido cruzarse por vuestros caminos.
Para nosotros un equipo, es un grupo de gente con ideas, sueños y maneras de hacer las cosas diferentes, con una meta común y con objetivos comunes. Es fundamental para que el equipo funcione, el respeto, el buen humor, la flexibilidad y el empeño de sacar el trabajo adelante de una manera que nos haga sentir felices. Tenemos la suerte de dirigir un grupo de gente extraordinario, que nos hace estar ilusionados como el primer día que empezamos a trabajar…
Y última pregunta, ¿cómo habéis llegado hasta El Ganso? ¿Cómo os sentís dentro de la empresa?
Cuando El Ganso llegó a Mallorca, allá por el año 2007, era un proyecto muy ilusionante, atrevido y brillante, que recién estaba empezando a concretarse… y no dudamos en subirnos al barco… Aunaba estilo y creatividad, y una gran calidad de confección, a precios muy razonables. El concepto que planteaba El Ganso era muy novedoso en aquel entonces, y estaba dirigido a un segmento de mercado que en España prácticamente no estaba explotado. Mucho ha llovido desde entonces. Nos sentimos muy orgullosos de haber puesto nuestro granito de arena, y de haber podido contribuir, muy humildemente, a que El Ganso sea la pujante empresa que es hoy.
